En los remotos senderos de la región, se entreteje una leyenda oscura que despierta temor en los corazones de los viajeros, la figura misteriosa es conocida como la "Colmillona". Descrita como una mujer de larga cabellera y ojos penetrantes, inquieta los caminos con su presencia al caer la tarde.
Cuenta la leyenda que la "Colmillona" emerge de las sombras, seductora al principio, atrayendo la atención de los desprevenidos con su belleza. Sin embargo, al acercarse, su rostro se transforma, revelando una dentadura imponente, similar a la de un caballo. Este grotesco cambio sumerge en el terror a los que osan aproximarse demasiado.
La leyenda se remonta a "la Maga", una joven dotada de poderes de adivinación y justicia, quien encontró su destino en la muerte. Desde entonces, su espíritu vaga en busca de hombres infieles, ebrios y viciosos, jurando venganza desde las profundidades de su morada.
Los lugareños susurran cuentos de encuentros fatídicos con la "Colmillona" en las desoladas sendas, advirtiendo a los viajeros sobre los peligros de cruzar su camino al caer la noche. Aunque algunos son atraídos por su encanto inicial, pocos pueden resistir el terror de sus fauces descomunales.
Así, la figura de la "Colmillona" se convierte en un símbolo de advertencia, recordando a los mortales la fragilidad de la seguridad en los senderos solitarios y la omnipresencia de la venganza más allá de la tumba. Su presencia persiste, tejiendo un manto de miedo y cautela en las noches más oscuras del campo.
